Minsk es un caballero con gomina; Vilna, una joven bohemia. Ella, hace ya unos diez años, entró a la Unión Europea mientras que él vive, todavía, bastante soviéticamente.
De las paredes de Vilna, cuelgan longplays, barbas, teteras, muñecos y gallinas. En Minsk, los muros son inmaculados y sólo algunos pasajes tienen grafittis, pero nunca con pretensiones rebeldes.
Minsk: Ópera y pescadores.
Minsk, Belarús - Marzo 2015
Puertas y ventanas en Vilna.
Vilna, Lituania - Marzo 2015